Los juegos Freemium prosperan: el 82 % de los jugadores participan en compras dentro del juego
Un nuevo informe conjunto de Comscore y Anzu revela información fascinante sobre los hábitos, preferencias y tendencias de gasto de los jugadores estadounidenses. El estudio, "Informe sobre el estado de los juegos de 2024 de Comscore", examina el comportamiento de los juegos en varias plataformas y géneros.
Los jugadores estadounidenses adoptan las compras dentro de la aplicación
El auge de los juegos Freemium
El informe destaca el notable éxito del modelo freemium. Un asombroso 82% de los jugadores estadounidenses realizaron compras dentro del juego de títulos freemium el año pasado. Este modelo de negocio, que combina el acceso gratuito con actualizaciones pagas opcionales, ha demostrado ser increíblemente popular, ejemplificado por juegos como Genshin Impact y League of Legends.
La adopción generalizada del modelo freemium, especialmente en juegos móviles, se remonta a pioneros como Maplestory de Nexon. El uso innovador de este juego de transacciones con dinero real para artículos virtuales allanó el camino para el estándar actual de la industria.
El éxito continuo de los juegos freemium ha beneficiado a los desarrolladores y a las principales plataformas como Google, Apple y Microsoft. Una investigación de la Universidad Corvinus atribuye este atractivo a una combinación de factores que incluyen la utilidad, la autoexpresión, la interacción social y el juego competitivo. Estos elementos incentivan a los jugadores a invertir en mejorar su experiencia de juego y acceder a contenido nuevo.
El director comercial de Comscore, Steve Bagdasarian, enfatizó la importancia del informe y afirmó que subraya el impacto cultural de los juegos y la importancia de comprender el comportamiento de los jugadores para las marcas que buscan atraer a esta audiencia.
Los hallazgos del informe están respaldados por comentarios de Katsuhiro Harada de Tekken, quien explicó que las transacciones dentro del juego en Tekken 8 son cruciales para financiar el desarrollo del juego, particularmente teniendo en cuenta los crecientes costos de producción.



